Sean Lee, un estudiante de último año de 18 años, es un ciudadano coreano que vive en Japón. Asiste a la Tilton School, una escuela preparatoria secundaria en Tilton, New Hampshire y ha estado en Ghana dos veces. Le encanta jugar al fútbol y no se cansa de ducharse con baldes. Sean ha trabajado como voluntario con Volunteering Solutions en Ghana dos veces, en 2011 y en el verano de 2012.
¿Por qué decidió trabajar como voluntario con Volunteering Solutions en Ghana?
Sean con niños en Tamale, GhanaSupongo que mi primer viaje a Ghana fue un acto de fe. Hace dos años, sentí la repentina necesidad de hacer realidad uno de mis sueños: trabajar como voluntario en el extranjero, en África. En ese momento, solo tenía 17 años, pero mi edad no me impidió ir. Como todavía no era legalmente un adulto, necesitaba una organización para la que trabajar y que me cuidara mientras estuviera allí. Hice una investigación exhaustiva sobre organizaciones de voluntariado y no pasó mucho tiempo hasta que llegué al sitio web de Volunteering Solutions. Vi algunas críticas excelentes de voluntarios anteriores y debo admitir que el sitio web parecía mucho más "confiable" que la mayoría de los demás sitios web de voluntariado en el extranjero. Al principio, quería trabajar como voluntario en Ruanda o Haití, sin embargo, a mis padres no les gustó la idea de que me fuera a países tan peligrosos. Ghana se considera un país más seguro que la mayoría de las demás naciones africanas, especialmente para los voluntarios, y esto también ayudó a tranquilizar a mis padres, en su mayor parte. Terminé amando Ghana y es por eso que me motivó a regresar el verano pasado.
¿Qué hizo que esta experiencia de voluntariado en el extranjero fuera única y especial?
Lo que hizo que esta experiencia de voluntariado en el extranjero fuera tan única y especial fue la integración de los voluntarios a la cultura ghanesa. Vivir con otros ghaneses y voluntarios es una experiencia que yo daba por sentado, y no me di cuenta de ello hasta que regresé. Haces amigos que vienen de todas partes y el sentido de comunidad te inspira a hacer más.
¿Cómo ha impactado esta experiencia tu futuro?
Viajar al extranjero me abrió los ojos a una realidad que nunca había experimentado y te da una perspectiva sobre el mundo en el que vivimos. Te vuelves introspectivo y aprendes a apreciar. Puedo decir que personalmente he ganado una mejor perspectiva de cómo puedo ser de ayuda para otras sociedades.
